Comenzó la Feria del Libro de Madrid. Y comenzó con tormentonas, como siempre. Y con la inaguración de Doña Elena, elegantísima (algo que es consustancial a Ella), acompañada por una ministra en chanclas que seguro que se embarró los pies.
Primeros pasos
Me incorporé a la Feria el sábado por la tarde. Y antes incluso de abrir la caseta ya tuve la visita de Lara, una niña riquísima que dio sus primeros pasos en la caseta de San Pablo, y que desde entonces nos visita siempre. Se trata de la hija de uno de los dueños del bar restaurante Divina Gula (Fuencarral, 102), un local de trato y decoración tan exquisitos como la comida que sirven.
Pajaritas de papel
Pajaritas de papel y rotuladores de colores (además de escritora y poeta es creadora de origamis) fueron las «armas» de Gracia Iglesias (El tren de los ronquidos), que firmó el sábado por la tarde, derrochando sonrisas y conversación. Una de las personas que se acercó a comprar su libro era una mujer llamada Gracia, casada con un Iglesias, y cuya hija se llamaba, también, Gracia Iglesias. Toda una curiosa coincidencia que hizo de la caseta de San Pablo un importante cónclave de «templos», con tantos Iglesias por ahí sueltos...
Gracia es una mujer de arrolladora simpatía que se mostró encantada de ser una «chica San Pablo» (así se refirió al conjunto de autores, entre los que hay muchas mujeres, que han publicado en la colección «La Brújula»). Así se lo dijo, por ejemplo, a Álvaro Fierro, coautor, junto con Gracia, de un precioso libro titulado Los Meagrada. Altamente recomendable para niños y grandes.
Ana Rosetti
Así se lo dijo también a Ana Rossetti, que charló un rato conmigo sobre los cómics y los libros infantiles de las antiguas Ediciones Paulinas y sobre la colección «La Brújula», que le encantó, y también sobre santa Teresa de Lisieux, por ejemplo. Un lujo de visita. Ana Rosetti nos dedicó un autógrafo para nuestra colección de marcapáginas dedicados.
Todo un crack
Nada, monta en moto, se tira en paracaídas, escribe libros... Mariano Fresnillo es, sin duda, todo un crack. Estuvo firmando el domingo por la tarde su libro Lágrimas por ti, un libro de entrevistas y testimonios sobre la manera de afrontar la discapacidad en la familia. En la caseta, él y su mujer, que ejercía de escribiente de su marido (aunque el autógrafo sí era de la mano de Mariano), su perro (se llama Lillo, es un magnífico ejemplar, más bueno y paciente que el santo Job, y aprovechó la circunstancia de que en la caseta no había demasiado espacio para darse un garbeo por el Retiro) y los dos vendedores. Fuera de la caseta, escenas simpáticas y también emotivas, que de todo hubo. Y el testimonio gráfico, visible ya en internet, gracias a su perfil como Invidente pero visible (pincha en este enlace y verás a Mariano en acción y a mí pululando por la caseta...). Lo repito, Mariano es todo un crack.
Primeros pasos
Me incorporé a la Feria el sábado por la tarde. Y antes incluso de abrir la caseta ya tuve la visita de Lara, una niña riquísima que dio sus primeros pasos en la caseta de San Pablo, y que desde entonces nos visita siempre. Se trata de la hija de uno de los dueños del bar restaurante Divina Gula (Fuencarral, 102), un local de trato y decoración tan exquisitos como la comida que sirven.
Pajaritas de papel
Pajaritas de papel y rotuladores de colores (además de escritora y poeta es creadora de origamis) fueron las «armas» de Gracia Iglesias (El tren de los ronquidos), que firmó el sábado por la tarde, derrochando sonrisas y conversación. Una de las personas que se acercó a comprar su libro era una mujer llamada Gracia, casada con un Iglesias, y cuya hija se llamaba, también, Gracia Iglesias. Toda una curiosa coincidencia que hizo de la caseta de San Pablo un importante cónclave de «templos», con tantos Iglesias por ahí sueltos...
Gracia es una mujer de arrolladora simpatía que se mostró encantada de ser una «chica San Pablo» (así se refirió al conjunto de autores, entre los que hay muchas mujeres, que han publicado en la colección «La Brújula»). Así se lo dijo, por ejemplo, a Álvaro Fierro, coautor, junto con Gracia, de un precioso libro titulado Los Meagrada. Altamente recomendable para niños y grandes.
Con Gracia Iglesias
Ana Rosetti
Así se lo dijo también a Ana Rossetti, que charló un rato conmigo sobre los cómics y los libros infantiles de las antiguas Ediciones Paulinas y sobre la colección «La Brújula», que le encantó, y también sobre santa Teresa de Lisieux, por ejemplo. Un lujo de visita. Ana Rosetti nos dedicó un autógrafo para nuestra colección de marcapáginas dedicados.
Profesores
Entre el público que se acerca a la caseta hay un porcentaje importante de profesores. No todos se identifican como tales, pero otros muchos sí, pues aprovechan la Feria para aprovisionarse de material para sus proyectos (y nosotros aprovechamos para ofrecerles catálogos de los productos que más les pueden interesar). Así fue con una amable profesora de Educación Especial, que se llevó el libro de Mariano Fresnillo porque quería conocer el mundo de la discapacidad desde la perspectiva de las familias, nos dijo, como complemento a su propia perspectiva como educadora. Y también es el caso de dos profesores del colegio Maravillas, que coincidieron en la caseta San Pablo comprando libros para ellos y para sus hijos (siete en total).Todo un crack
Nada, monta en moto, se tira en paracaídas, escribe libros... Mariano Fresnillo es, sin duda, todo un crack. Estuvo firmando el domingo por la tarde su libro Lágrimas por ti, un libro de entrevistas y testimonios sobre la manera de afrontar la discapacidad en la familia. En la caseta, él y su mujer, que ejercía de escribiente de su marido (aunque el autógrafo sí era de la mano de Mariano), su perro (se llama Lillo, es un magnífico ejemplar, más bueno y paciente que el santo Job, y aprovechó la circunstancia de que en la caseta no había demasiado espacio para darse un garbeo por el Retiro) y los dos vendedores. Fuera de la caseta, escenas simpáticas y también emotivas, que de todo hubo. Y el testimonio gráfico, visible ya en internet, gracias a su perfil como Invidente pero visible (pincha en este enlace y verás a Mariano en acción y a mí pululando por la caseta...). Lo repito, Mariano es todo un crack.
Con Mariano Fresnillo y su mujer
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